miércoles, 9 de noviembre de 2022

 

La lengua de Cervantes goza de una salud envidiable y promete colarse en cada rincón del globo. Suman ya 580 millones los hispanohablantes en todo el mundo, y se posiciona como la tercera lengua más utilizada en la Red.  

Las cifras hablan por sí solas, auguran un futuro prometedor para este idioma e invitan a sumarse a la creciente comunidad que lo aprende en todo el mundo.

Sin embargo, su dispersión geográfica asusta a los estudiantes, que ya batallan con un sinnúmero de reglas gramaticales y cerca de 100.000 palabras. Los distantes rastros del español que van desde América hasta la Península Ibérica, han delimitado claras diferencias entre las variantes habladas en las distintas regiones. Esto ha llevado a que nos cuestionemos incluso si existe un español de España y un español de América Latina.

Con total seguridad le digo que no. Los que atesoramos el español como lengua materna, sin importar donde hayamos nacido, hablamos un mismo idioma. Se han establecido ciertas normas de uso, más visibles en la comunicación escrita, que nos permiten entendernos. 

Sin embargo, no puede negarse que la distribución geográfica del español y los distintos niveles socioculturales de los hablantes son causas de diferencias en el uso de determinadas palabras, la pronunciación y ciertas cuestiones gramaticales, que resaltan con mayor frecuencia en la comunicación oral.

Los idiomas tienen vida, evolucionan, y se adaptan a cada comunidad. Poder identificar las peculiaridades de cada región no solo nos posibilita satisfacer nuestra necesidad primitiva de comunicarnos sin importar las tierras que pisamos, sino que también nos permite comprender mejor a los demás en una sociedad donde la desinformación y el odio ganan terreno. 

Porque me apasionan los idiomas y soy consciente de las oportunidades que ofrecen,

Porque amo la tierra donde nací y me siento orgullosa de sus palabras,

Porque quiero hacerte más ligera y amena esta aventura que es aprender el español,  

Vengo a regalarte, al ritmo de Pedro Luis Ferrer, un pedacito de Español, uno seseante, que a veces olvida las consonantes finales y se aferra a  sus orígenes arahuacos: “Que soy Mahoma, voy por la loma/ Y en el idioma soy el mejol/ Ay que felicidad, como me gusta hablal español!”

 

Desde este blog voy a estar también compartiendo con amigos que hablan un idioma increíble, El de los EMPRENDEDORES:

- Mis amigos de Solerlifetech quienes hablan el mejor idioma del Marketing Digital

- Mi amigo Paco con su Éxito en la vida y las locuras de un caminante que no te puedes perder

 
Y pienso seguir hablando español con distintos bloggers amigos... ¿te embullas?  

  La lengua de Cervantes goza de una salud envidiable y promete colarse en cada rincón del globo. Suman ya 580 millones los hispanohablantes...